20 de enero de 2022
«Burkland, Nygruvan, Dalby, y ahora vamos a llegar a Cecilia...»
Mattias Dömstedt se desplaza por las diferentes partes de la mina mientras conduce el coche a través de los largos túneles. Es el coordinador de producción técnica del proyecto de Zinkgruvan Mining para comenzar a perforar mediante control remoto a través de una red 4G exclusivay estamos en camino para alcanzar un nivel en el que pueda controlar el equipo Simba E7 de Epiroc, situado a unos 350 metros bajo tierra.
Dömstedt detiene el coche y nos bajamos. Al final del recorrido de la mina, el Simba perfora a plena capacidad, pero la cabina está vacía.
«Ahora mismo estamos en la zona que constituye la primera etapa del proyecto. La segunda etapa de la red está prácticamente completada y ya hemos comenzado a trabajar en la tercera etapa», señala el director del proyecto Håkan Mann.
Está muy entusiasmado.
«Hasta ahora, ha ido demasiado bien como para ser cierto».
Jocke Lindblad, operario de Zinkgruvan Mining
A principios de la primavera de 2021, Zinkgruvan Mining, en colaboración con sus proveedores Epiroc e IT, y con el operador de telecomunicaciones Telia, conectó por primera vez su equipo Simba E7 a una red LTE (Long Term Evolution). Desde entonces, la producción remota ha despegado con mucha fuerza en las áreas donde se ha puesto en marcha la red LTE, aunque la perforación que se lleva a cabo a través de la red se sigue considerando una prueba y no se mide contra ningún objetivo específico.
«Hasta ahora, hemos perforado siete palés de forma remota. Funciona muy bien, y tan pronto como encontramos algo que no funciona, puedo llamar al ingeniero de servicio de Epiroc que ha estado allí desde el principio», señala el operario Jocke Lindblad.
Supervisa el equipo desde una oficina tranquila situada en la superficie, junto a una ventana por la que entra la luz del día y con compañeros que ocasionalmente se pasan por allí para conversar.
«También me gusta bajar a la mina, pero ciertamente es más seguro y mejor para el cuerpo sentarse aquí. Es agradable poder tomarme un café o respirar aire fresco cuando me apetece», afirma.
El hecho de que los operarios no necesiten bajar a la mina, excepto cuando algo es difícil o se requiere algún mantenimiento, significa que pueden perforar un promedio de cuatro horas más por día.
En términos puramente técnicos, Lindblad puede operar el equipo desde una oficina exactamente de la misma manera que lo haría en la propia mina. Las pantallas y palancas son las mismas que en el equipo perforador.
«La única diferencia es que no puedo oír el taladro. Aunque hay que vigilar de cerca los valores de medición en la pantalla», afirma Lindblad.
"Esto nos ofrecerá un mejor control sobre nuestra producción y reducirá nuestros costes. Esto nos hace sentir realmente bien. Pero el mayor beneficio estará relacionado con la seguridad, ya que nuestros empleados tendrán que pasar menos tiempo en la mina."
La creación de una red LTE de uso exclusivo ha supuesto todo un reto. Es mucho más difícil crear un diseño en una mina que en la superficie. Sin embargo, la elección fue fácil.
«Estudiamos la posibilidad de ejecutar la automatización a través de una red Wi-Fi, pero como queremos que la red funcione durante al menos otros diez años, ¿por qué no invertir en un sistema que pueda gestionar las demandas del futuro?», señala Craig Griffiths, responsable de minería de Zinkgruvan Mining.
Está convencido de que la inversión mantendrá la mina en una buena posición durante muchos años.
«Esto nos proporcionará un mejor control sobre nuestra producción y reducirá nuestros costes. Esto nos hace sentir realmente bien. Pero el mayor beneficio estará relacionado con la seguridad, ya que nuestros empleados tendrán que pasar menos tiempo en la mina».
Håkan Mann, director de proyecto de Zinkgruvan Mining
Mientras que el equipo Simba, ocasionalmente y con la supervisión de Lindblad desde la superficie, cambia de posición para un nuevo barreno, Mattias Dömstedt y Håkan Mann tienen tiempo para explicar cómo funciona la tecnología y cómo ha progresado el trabajo de instalación.
«Una vez completado, el proyecto habrá utilizado unas 70 unidades de radio remotas, es decir, transmisores y receptores de señales de radio en la red LTE, instalados en la mina, que proporcionan una cobertura de unos 70 kilómetros. A continuación, la red LTE se ampliará a medida que la mina se vaya expandiendo. La parte de la red LTE actualmente en funcionamiento abarca unos 15 km», afirma Mann.
Para entonces, esperamos que en 2022, será posible utilizar otro equipo Simba mediante control remoto siempre que el RCS4 se pueda usar a través de LTE. Pero Dömstedt, Mann y el resto de compañeros que participan en el proyecto ya han recorrido un largo camino desde las primeras pruebas que se realizaron para comprobar si el control remoto a través de la red LTE funcionaba realmente.
«Estabamos en el taller de Epiroc ubicado a 800 metros de profundidad en la mina. Contábamos con una estación remota en la sala junto al equipo perforador, y observamos si se movía alrededor del equipo perforador, y así era», señala Dömstedt.
Mann sonríe mientras recuerda lo que sucedió. Fue una prueba importante. Es un ejemplo de lo que la red LTE puede lograr y fomenta el desarrollo continuo de más cosas para las que se puede utilizar la red.
«Como somos los primeros en crear algo como esto, no hemos podido pedir ayuda a nadie y hemos tenido que resolver todos los problemas nosotros mismos a lo largo del camino».
Según Mann, la clave del éxito reside en unas vías de toma de decisiones claras y cortas, así como en una forma de trabajar responsable en la que todos, incluidos socios y proveedores, asumen su responsabilidad y están plenamente comprometidos.
«Este es exactamente nuestro enfoque para este proyecto. Todas las partes implicadas han tenido contacto directo entre sí. Incluso los operarios han podido hablar directamente con las personas que han desplegado la red.
La estrecha colaboración con Epiroc ha sido absolutamente crucial para el proyecto.
«Nuestro desarrollo ha ido de la mano con el de Epiroc. Sabían que íbamos a construir una red LTE y desplegar posteriormente su sistema remoto», dice Mann.
A pesar de que Zinkgruvan aún está muy lejos de finalizar el proyecto, tanto Mann como Dömstedt están orgullosos de lo que han logrado hasta ahora. Después de completar 6500 metros perforados a distancia, pueden confirmar que la perforación es más eficiente que nunca, y al mismo tiempo, los operadores están satisfechos y contentos.
«Ha sido fantástico trabajar en este proyecto. Llevo cuatro años trabajando con la automatización de diferentes maneras aquí en la mina y ahora hemos empezado a perforar y ver los primeros resultados. ¡Ha sido realmente divertido! Por supuesto, el hecho de que recibamos una respuesta tan buena de los operarios hace que sea aún más emocionante», afirma Dömstedt.
Datos de Zinkgruvan - Perforación remota a través de la red LTE ∙ La mina dispone de un total de cuatro equipos perforadores Simba de Epiroc. En la actualidad, uno de estos equipos está conectado a través de Simba Teleremote. ∙ La primera prueba, que incluyó el control remoto del equipo a través de la red LTE, se llevó a cabo en diciembre de 2020 en el taller de Epiroc ubicado en la mina. La estación remota se configuró en la sala situada al lado del equipo. ∙ En la actualidad, los operarios se sientan en una oficina situada en la superficie y supervisan la perforación. En el futuro, es posible que se muden a una oficina situada a 800 metros de profundidad en la mina para estar más cerca del equipo. ∙ Hasta ahora se han perforado 6500 metros. El objetivo es alcanzar los 10 000 metros, tras lo cual se llevará a cabo una evaluación exhaustiva. ∙ Gracias al control remoto, Zinkgruvan Mining gana, de media, cuatro horas extra de perforación al día. ∙ Para que la red LTE funcione con Simba Teleremote, no se requieren velocidades extremas, aunque la red debe ser estable y no presentar latencia alguna.
Simba E7 2022 Underground Rock Excavation International Perforación Teleremote drilling Historia de cliente
