Los tipos de equipos de perforación preferidos por los contratistas de perforación del sector de la construcción, por lo general los equipos de perforación con martillo en cabeza, son inherentemente más ruidosos que, por ejemplo, los equipos de DTH. Una razón de esto es que la perforadora hidráulica está montada en la deslizadera en lugar del martillo en fondo. Sin embargo, la necesidad de reducir el ruido en obras urbanas puede abordarse equipando el equipo con un kit de reducción de ruido, que Epiroc ofrece desde 2005. Hay disponible una versión actualizada para usar en equipos como SmartROC T35 y SmartROC T40, reduciendo la producción de ruido de estas máquinas de 127 dB(A) no silenciadas a 115 dB(A), y permitiendo mantener una conversación junto al equipo de perforación operativo. Un sistema RCS más sofisticado también juega un papel en la reducción del ruido, ya que los motores de la generación actual de equipos de perforación responden a los requisitos segundo a segundo, en lugar de funcionar a máxima velocidad en todo momento.
El chorro de aire es un fenómeno particular provocado siempre por la detonación de explosivos aislados (o inadecuadamente aislados). La onda de presión resultante se manifiesta como ruido y en daños a las propiedades circundantes; incluso niveles bajos de sobrepresión pueden romper las ventanas, mientras que las ondas de alta energía pueden causar daños estructurales. La minimización del riesgo se consigue mediante procedimientos de voladura minuciosos y asegurándose de que todos los explosivos estén aislados con una cantidad adecuada de material de recubrimiento o vapor antes de la detonación.
Las vibraciones del suelo son el resultado de la voladura, con el objetivo de un buen diseño de voladura para minimizar la aceleración máxima de partículas asociada con la propagación de ondas de choque por el suelo. Es bastante común que los consultores especializados en voladuras participen para ayudar al contratista con el control de vibraciones y el diseño de patrones de perforación, así como para llevar a cabo un estudio exhaustivo de las estructuras adyacentes antes de que pueda comenzar la perforación y la voladura. La clave para minimizar las vibraciones del suelo es optimizar la secuencia de voladura en lo que concierne la cantidad de explosivos que se detonan al mismo tiempo, mediante el uso de un programa de retardo del detonador diseñado correctamente. Además, el diámetro del orificio de perforación debe mantenerse lo más pequeño posible, normalmente en el rango de 30–50 mm. Para eliminar el riesgo de proyección de rocas, las voladuras se pueden cubrir con material inerte, como arena, o usando alfombras pesadas hechas de madera, goma o neumáticos, cortados en secciones y unidos con alambre de acero. Estas mantas, que pesan alrededor de 1 tonelada cada una, absorben energía y evitan que la roca suelta se disperse, mientras que su estructura permite el paso de los gases producidos por la voladura.