La exploración que marca la diferencia
Hay dos métodos principales de exploración de minerales. La extracción de testigos permite obtener una muestra cilíndrica sólida de la tierra a una profundidad exacta. La perforación de circulación inversa (RC) produce una muestra triturada, que comprende recortes de una profundidad bastante bien determinada en el barreno. Aparte de eso, el pozo de perforación en sí puede proporcionar más información, sobre todo si se usan dispositivos de registro para detectar anomalías físicas, similares a los estudios geofísicos mencionados anteriormente.
Para cuantificar la mineralización y definir la forma, el tamaño y el contenido de metal del yacimiento, se requiere un procedimiento detallado en las actividades de exploración. En cada paso del procedimiento, los geólogos examinan la información disponible para recomendar la continuación de los esfuerzos de exploración.
Si bien la exploración nunca ha sido tan desafiante como lo es hoy, los avances tecnológicos han permitido que las tareas de perforación más arduas y repetitivas puedan superarse con confianza, en gran medida gracias al rápido progreso de los sistemas de control avanzado y la automatización.