Entre llamas: equipos TH60 atrapados en incendios forestales (primera parte)

Dos de los tres equipos de perforación de pozos de agua TH60 de Epiroc pertenecientes a Fisch Bros. Drilling Inc. de Sebastapol se han visto atrapados en incendios forestales. Milagrosamente, el primer equipo no sufrió ningún daño durante la tormenta ígnea ocurrida en California del Norte en 2017, que hasta el momento ha sido la ola de incendios más grande y costosa de la historia de California.

Sebastapol está a mitad de camino en el trayecto de 40 minutos que une la costa pacífica, al oeste, con Santa Rosa, al este. El viernes 6 de octubre de 2017, Scot Unterseher acababa de finalizar la perforación de un pozo de riego de 243,8 m (800 pies) cerca de Santa Rosa. Había vuelto a casa a pasar el fin de semana con la intención de volver a trabajar en el pozo el lunes. Pero, alrededor de las dos de la mañana, se despertó en su casa de Santa Rosa consciente de que algo iba mal, incluso antes de que ordenasen la evacuación. Unterseher se acercó a la ventana de su habitación.

Epiroc TH60 waterwell drilling rig in caught in California fires

Ed Fisch y Scot Unterseher

«El viento soplaba con fuerza. Hacía mucho calor», recuerda. Un incendio iniciado en Calistoga, en el Valle de Napa, se había trasladado durante la noche y se desplazaba con vientos del diablo de hasta 96 km/h (60 mph). «Me enteré después de que el fuego ardía con tanta intensidad aquella noche que no solo quemaba los edificios a su paso, también asolaba sus cimientos».

Todos los que vivían en la calle de Unterseher se pusieron a salvo, pero el TH60 quedó a merced de uno de los incendios. Ed Fisch, que hace 43 años fundó junto con su hermano John de la empresa de evaluación, diseño y desarrollo de pozos de agua, intentó llegar hasta el equipo al día siguiente del paso del incendio. Iba de camino cuando encontró una barricada montada por la California Highway Patrol.

«Podía ver el equipo a través del humo», cuenta Fisch. «Estaba solo a 90 m (100 yardas) de la carretera, pero no me habrían dejado ir en coche hasta allí». Al dar la vuelta, Fisch encontró un lugar en el que aparcar junto a la carretera y fue andando hasta su TH60. El equipo no había sufrido ningún daño. Las llamas habían alcanzado a los viñedos, quemando sus filas exteriores. Actualmente, Fisch Bros. sigue utilizando ese equipo para sus perforaciones.

Fisch cree que los incendios no dañaron algunos de los famosos viñedos de la región porque «simplemente, estaban demasiado verdes para arder». Los tres equipos TH60 de la empresa han trabajado durante muchos años para mantener esos viñedos prósperos y productivos. Parecía que los viñedos les estaban devolviendo el favor.

Sin embargo, los viñedos no fueron un cortafuegos suficiente para impedir que el fuego siguiera avanzando.

Las ascuas que viajaban por el aire, «algunas tan grandes como ladrillos», afirma Unterseher, cayeron a más de 8 km (media milla) de distancia de su origen. El fuego siguió su camino, cruzando viñedos, arroyos e incluso grandes carreteras para seguir quemando los campos secos y las colinas cubiertas de hierba y árboles, además de calcinar cualquier edificio que encontraba a su paso.

Tardaron más de tres semanas en contener por completo los incendios más graves, aunque en este lugar, las condiciones mejoraron rápidamente y Unterseher pudo volver hasta el sitio en el que se encontraba su TH60 solo diez días después para completar el trabajo.

Fue una de las pocas veces en las que el equipo no ha trabajado desde que Fisch Bros. lo adquirió por primera vez hace 10 años. En este momento, tiene más de 27 000 km (17 000 millas) y 11 400 horas de funcionamiento. Sus otros equipos, un modelo de 2000 y otro de 2004, tienen unos registros incluso mayores, y ya era hora de cambiar el equipo del 2000. Encargaron un modelo de TH60 del año 2017 a la fábrica de Garland que recibieron en julio de 2018.

El nuevo equipo se configuró de una forma distinta al modelo estándar del 2000 al que sustituía y, aunque se trata de un TH60 básico, afirma Fisch, este proporciona a sus perforistas todo lo que necesitan para perforar para los clientes de su zona y cumple con los requisitos medioambientales de California.

Entre llamas: equipos TH60 atrapados en incendios forestales (segunda parte)