Cristóbal Hamburger: Un romántico viajero en Epiroc

Como un rubro dinámico y entretenido califica a la minería Cristóbal Hamburger, ingeniero Comercial y Magister en Administración de Empresas de la Universidad Nacional Andrés Bello, y quien se desempeña hace casi dos años en Epiroc.

Este joven profesional, quien hoy ocupa el cargo de Ingeniero en Garantía Subterránea dentro de la compañía, ya tiene una meta clara. “Me gustaría en un futuro no tan lejano irme a otro país y seguir desarrollando mi carrera profesional. Feliz si pudiera lograr esto trabajando para esta misma empresa”, indica.

En su corta vida laboral, Cristóbal ya suma experiencias en el extranjero. Recién titulado y con la visa Work & Holiday se fue por un año a Australia, donde se desempeñó en diversos oficios dentro de rubros como construcción, bodega, home delivery, seguridad y descarga de pescado.

Su espíritu viajero lo heredó de su abuelo paterno, quien llegó a Chile desde Alemania escapando de la Segunda Guerra Mundial. De hecho, su apellido tan particular proviene de la ciudad de Hamburgo.

Primer empleo fijo

A Epiroc, su primer empleo fijo como él lo define, ingresó como Analista de Marketing. Luego de un breve paso de cinco semanas por el taller COP (martillos hidráulicos), fue enviado por 8 meses a Copiapó a trabajar en el contrato con Pucobre. A comienzos de 2018 volvió a Santiago para asumir el cargo que hoy desempeña.

“Todos los días aprendo algo nuevo. Trabajando con gente tan capacitada en lo que hace es mucho más fácil captar conocimientos”, resalta.

Cristóbal destaca el buen ambiente laboral de la empresa, factor que -según dice- fue prioritario a la hora de elegir un lugar donde integrarse.

Consultado por el sello que quisiera darle a su gestión, afirma que espera aportar con compañerismo y motivación. “La colaboración entre todos es clave para el trabajo en equipo. Y si uno le pone ‘ganas a las cosas’ que hace, generalmente se logran los objetivos”, enfatiza.

A su juicio, la receta para alcanzar las metas que uno se propone es tener un plan de acción y visualizar donde se quiere estar mañana. “Con motivación todo se puede alcanzar. Disfrutar lo que se hace es la clave para tener una vida sana”, afirma.

“Azul” y “patiperro”

Fanático del equipo de fútbol de la Universidad de Chile, algo que heredó de su padre, Cristóbal revela que le apasiona ese deporte. “Jugué desde siempre: en el colegio, en la universidad y con grupos de amigos”, afirma. Pero, lamentablemente, tres cortes de ligamento cruzado lo obligaron a dejar la actividad.

La otra pasión de este profesional soltero, nacido en Santiago, son los viajes de placer. Ha estado en varios países de Sudamérica, y su año de trabajo en Australia lo finalizó recorriendo -durante dos meses- Tailandia, Camboya, Vietnam e Indonesia.

“Las distintas culturas y realidades que uno conoce al viajar sirven mucho para aprender de ellas, y -en muchas ocasiones- agradecer lo que uno tiene”, agrega Cristóbal.

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