Con los ojos en el premio

12 de agosto de 2020

Un equipo dañado se convierte en una oportunidad para que este perforista consiga el equipo de sus sueños: el TH60 de Epiroc.

Marshall Eye fundó su empresa en 1958 cerca de Potosi, en Missouri. Se convirtió en el mayor proveedor de servicios de perforación de pozos de su zona, realizando hasta 200 pozos de agua residenciales al año hasta que su fundador falleció en 2008.

El hijo de Marshall, Felix, había vuelto a casa para ayudar a su padre ya mayor después de trabajar para empresas de perforación de todo el país. Cuando su padre falleció, su madre, Joann, se convirtió en la presidenta de la empresa. Cuando la demanda del mercado se desplomó, Felix pudo comprobar el nivel de dedicación de su madre. «Trabajó más duro que nadie, haciendo que los extremos se uniesen. Dependíamos de ella». Joann pudo mantener la empresa en funcionamiento, pero un par de empleados cruciales se fueron en 2017.

«¿Vender o intentar seguir adelante?» le preguntó a Felix y este no dudó. Felix pasó a dirigir las operaciones de perforación. Ahora que es un perforista experimentado, su cometido es optimizar los procesos, redudir los residuos, disminuir los costes y aumentar los márgenes. La demanda volvió a surgir y los sueños de Felix se hicieron realidad hasta que, una tarde, se incendió el equipo de perforación de su padre.

«Inyecté el tubo con lechada y estaba perforando un barreno de 15 cm (6 pulgadas). Nuestro hijo más pequeño, Trevor, que estaba sentado en la cabina del camión de perforación, me preguntó si quería una botella de agua. Le dije que sí. Salió de la cabina para coger algo de una nevera cercana. Mientras se acercaba a mí en la plataforma del operario, notamos una explosión seguida de un incendio en la parte inferior del equipo de perforación. Apareció una pared gigante de fuego sobre el equipo». El fuego lanzó a todos en diferentes direcciones y Felix fue uno de los que más lo sufrieron. «Mi espalda estaba tan caliente como una estufa». Felix dio vueltas en el suelo para apagar el fuego. Luego se dio cuenta de que no había ninguna llama. Era su ropa la que estaba muy caliente.

"La seguridad fue la razón principal por la que cambié a un TH60."

Felix Eye ,Supervisor, Marshall Eye Jr Water Well Drilling & Repair Service

Nadie resultó herido, declaró Eye. «Pero el equipo quedó destrozado y requería una gran reparación. Teníamos pedidos programados, pero nada con lo que perforar». Felix descubrió que otros dos equipos de perforación, de la misma marca y modelo, habían experimentado incidentes similares relacionados con incendios.

Felix confió en Epiroc. Había sido operario de un equipo RD20 e intentó convencer a su padre para que comprara un T3W. «Mi padre era muy obstinado. Yo era más joven y más práctico. Lo que yo pensaba era por qué teníamos que esforzarnos tanto». El TH60 demostró ser el equipo perfecto. Buscaba un equipo usado, pero encontrar un equipo de perforación usado que cumpliera sus expectativas resultó ser demasiado complejo. Así que optó por un equipo de perforación nuevo.

Eye recibió el equipo en agosto de 2017. «Increíblemente, todos nuestros clientes esperaron con paciencia nuestro regreso», afirmó, «y desde entonces todo ha sido fantástico».

La empresa está ubicada en el Bosque Nacional Mark Twain de Missouri, en la periferia de las Tierras Altas de Ozark, a 121 km al suroeste de St. Louis. Felix tenía dos requisitos para poder trabajar en estas ubicaciones. El equipo de perforación debe ser lo suficientemente pequeño como para poder trabajar en las propiedades residenciales de sus clientes. Además, debía tener una construcción robusta y, al mismo tiempo, ser versátil para poder trabajar en la variada formación de esquisto y piedra caliza.

Eye preparó el TH60 ese día para un pozo residencial ubicado en una propiedad rural remota. Empezó con una broca de 254 mm (10 pulgadas) en un martillo QL 80 DTH, perforando rápidamente a través de 5 metros de pies de capa de recubrimiento que contenía bandas delgadas de arenisca en arcilla. Continuó hasta 24 m (80 pies) en piedra caliza y revistió esta sección superior del perfil del pozo con PVC de 6 1⁄4 pulgadas.

Después de instalar el revestimiento, se llenó con lechada usando 14 sacos de virutas de bentonita y continuó perforando el barreno de producción con un martillo COP 64 con una broca de frente cóncavo de 6 pulgadas hasta alcanzar una profundidad total de 54,9 m (180 pies), obteniendo una producción de 151 l/min (40 galones por minuto). A continuación, se barrió el pozo con aire, el equipo limpió el área de trabajo y realizó un lavado rápido del equipo de perforación.

En el momento en que ya estaban listos para recoger e irse, el pozo producía un agua casi perfecta y sin sedimentos. No habían pasado más de 20 minutos hasta que el mástil, con una iluminación intensa, descendió silenciosamente y el personal empezó a recoger todo.

Eye se subió a la cabina, sonrió y dijo: «Días como este hacen que me sienta agradecido por tener este TH60».

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